martes, 4 de mayo de 2010

BUCLE

El exceso de cafeína me despereza arrancando una nueva hoja de calendario ¡Dios! no soporto madrugar. La ojeras se me desparraman en el suelo. Me rasco la coronilla dos o tres veces antes de bostezar por vigésima vez y refrescarme la cara con el agua gélida del grifo, inerte durante la noche. Seguro que hoy vuelve a hacer el mismo calor insoportable de ayer. Todo me parece familiar. Enciendo la radio y vuelve a torturarme el Imagination de Belouis Some . Entonces maldigo el día, aún no he podido arreglar el jodido condensador del flujo de mi máquina del tiempo.

4 comentarios:

BRILLI-BRILLI dijo...

Que mal despertar,miedo me daría cruzarme contigo en estos momentos..ánimo!

Besos

Mónica dijo...

JAJAJA!!! NADA TU TRANKILO, ESO ES LA JUNTA LA TRÓCOLA JAJAJA!!
ANIMO QUE YA MAÑA ES MIERCOLES!!

BESITOS

INDIA dijo...

Tomate tu tiempo, para desperezarte. Para conseguirlo, levantate temprano.
Un saludo.

India

Beatriz dijo...

Es que no es bueno para mañana lo que puedas hacer hoy, jolín ¡¡¡ tratándose del tiempo me ha salido una paradoja