lunes, 14 de junio de 2010

CONCIERTOS ELITISTAS

Me considero un amante de la música en directo, de los grandes conciertos, y de los grandes festivales, musicales. Nunca he dudado en salir de mi isla cada vez que puedo, para asistir a grandes conciertos en la península e incluso en otros países. Asistir a festivales como Benicassin, Bilbo Rock, y otros muchos. Y lo he hecho ante la falta de oferta en mi isla de este tipo de eventos. Desde hace tiempo se han realizado varios de estos grandes conciertos en Tenerife ahuspiciados para atraer al público extranjero con la eterna excusa de potenciar el turismo.


Por la isla ya han pasado Rod Stewart o Elton John. Alicia Keys, más contemporánea, ha sido la última en unirse al carro tras el frustrado intento de Whitney Houston, que tuvo que cancelar su concierto en la isla por su mal estado de salud y el de su voz ya caduca. Ahora le tocará el turno a Simply Red, uno de mis grupos preferidos. Sin embargo las entradas oscilan entre los 40 y 150 euros y ya sé que si pago la mínima entrada, tedré que asistir con unos prismáticos y un sonotone para poder apreciar algo tumbado en la colina o el bunker de un jodido campo de golf.

En la foto, plano del campo de golf donde se celebran algunos de los conciertos
Grandes conciertos pero a la vez, grandes oportunidades de hacer caja a costa del turismo, sin que los verdaderos amantes isleños de la música puedan permitirse pagar unas entradas que llegan a alcanzar los 300 euros en ocasiones para poder ver un concierto en primera fila, mientras el pueblo llano se sitúa a 50 o 100 metros de distancia y pagando entradas de 40, 60 o 70 euros.

Mientras que en otros lugares de España podemos ver grupos míticos de la música por 45 o 50 o incluso 90 euros pero con el derecho a luchar por un puesto en la primera fila, en Tenerife, si no pagas 200 lo verás en el gallinero y saltándole encima de la nariz al compañero para poder ver algo, y eso si lo puedes ver o escuchar, por que en ocasiones, las condiciones técnicas dejan mucho que desear. Ocurrió en el último concierto que Alicia Keys ofreció en Santa Cruz donde las personas que pagaron 35 euros por estar de pie se tuvieron que conformar con ver el espectáculo desde 50 metros más atrás y con la torre de sonido y luces en medio de ellas, sin que apenas existieran pantallas laterales para seguir el concierto a través de ellas. Además el concierto fue al aire libre dejando la acústica de las gran voz de la artista a merced del viento y no de los recintos cerrados donde habitualmente se hacen este tipo de conciertos en otros lugares del mundo. Esta estafa musical, refleja la falta de sensibilidad con la cultura que tienen ciertas empresas en esta isla, aunque no creo que ni siquiera su conciencia se recién: son empresas que trafican con la cultura a la que ven como un producto de negocio con el que forrarse a costa de los demás.

Están en su derecho de hacer negocio, al fin y al cabo es el objetivo de este bárbaro sistema capitalista que se desmorona y flaquea ante la pasividad de una población, incapaz de reaccionar ante una crisis en la que nos han metido las grandes empresas. Precisamente por eso, por la situación en la que vivimos actualmente, desembolsar 150 euros por disfrutar decentemente de un concierto de un buen grupo, me parece indignante, y es más, una total falta de respeto a todos los aficionados de los buenos conciertos en directo. Lástima que estas productoras solo miren la pela y descuiden el trato a las personas que quieren simplemente... disfrutar de la música.

4 comentarios:

Alhy dijo...

No tenía ni idea de que la situación estaba tan mal por esos lares. I'm sorry!!

Yo creo que más indignante que las mafias que parecen haber abducido el arte, es la pasividad y apatia de la gente. ¡Con de la de cosas que se podrían conseguir si nos movilizaramos! Firmas, protestas, boycotts, ¿dónde está el espíritu supuestamente rebelde de la media de los "consumidores de musica"?
[Atención: comentario politicamente incorrecto al canto]me repatea que lo único que movilice a la gente y la haga salir a la calle sea el maldito futbol. Ya está, ya lo he dicho.

Arg...

Kisses asqueados ***

Tom dijo...

"Están en su derecho de hacer negocio, al fin y al cabo es el objetivo de este bárbaro sistema capitalista que se desmorona y flaquea ante la pasividad de una población, incapaz de reaccionar ante una crisis en la que nos han metido las grandes empresas." Amén. De acuerdo al 100%. Que triste que hasta la cultura sea ya un mercadeo de este sistema atroz.

BRILLI-BRILLI dijo...

Las produxtoras y gran parte de los músicos no disfrutan de la música,disfrutan del dinero,pero siempre nos quedarán maravillosas bandas como Simply Red que nos transmiten su cariño por la buena música.No te los pierdas,muy buenos en directo.

Besos

Alicio Koys dijo...

Tienes toda la razón, y además en Santa Cruz no hay grandes recintos cerrados para este tipo de conciertos únicos, si acaso el Recinto Ferial pero hay que adecuarlo para eso.
Otra cosa, trabajo muy cerca de donde se colocó una carpa para vender entradas al concierto (en la Plaza del Chicharro) y se vio que no iba mucha gente a comprarlas, pero así daría tiempo a que se piense si merece o no la pena comprar una entrada, porque Internet obliga a comprar, pagar y ¡ya está! con la consiguiente decepción por el sitio que le toque colocarse.
¡Ah!, en uno de esos días fueron el concejal de Santa Cruz+Social y el organizador del concierto a sacarse la fotito para los boletines de prensa.