lunes, 16 de noviembre de 2009

YO TAMBIEN QUIERO SER EXCOMULGADO

Si fuera católico no quitaría razón a las palabras del portavoz de la conferencia episcopal Antonio Martínez Camino, en España cuando amenaza de herejes y de excomulgar a todos aquellos políticos católicos que voten a favor de la reforma de la ley del aborto en el parlamento.
Si se ciñen a lo que dice a la iglesia católica, esos políticos debería de estar cagaditos de miedo. Sin embargo la realidad es diferente. La opinión de la iglesia en asuntos políticos hoy en día, no tiene nada de valor así que espero que en la Conferencia Episcopal tengan mucho trabajo en poco tiempo.

El problema es que la Conferencia Episcopal española, heredera directa del franquismo, es tan fanática como cualquier otro fundamentalismo. Si bien aún no han llegado al punto de cometer atentados terroristas, sí que se atreven a cometer atentados sociales y éticos por doquier, escudados bajo el yugo de la estricta moral católica.

Señores obispos, cardenales y demás prole eclesiástica, déjense ya de vender e intentar inculcar por la fuerza, su manera de pensar y adoctrinar, porque, al igual que hay miles de fieles a su causa, también existen millones de infieles que se merecen un respeto. Un respeto que ustedes nunca han sabido soportar desde el principio de los tiempos. Un respeto que ni siquiera lleva a cabo con sus propios fieles. Un respeto que se pasan por el forro de la sotana creyéndose poseedores divinos de la verdad absoluta.

Vuelven a equivocarse. No me da vergüenza confesar mi anticlericalismo pero, por desgracia mis padres me bautizaron cuando era pequeño, así que según los registros de la parroquia debo ser cristiano. Nada mas lejos de la realidad.

Llevo tiempo pensándome apostatar, y si apoyar la ley del aborto ayuda a que me excomulguen, que me digan ahora mismo dónde tengo que firmar, así me ahorraré un trámite largo y extenso.

Independientemente de mi deseo, sigo demandando que hay miles de mujeres que se merecen un respeto, el respeto a querer decidir por su vida. Sí su vida, esa que ustedes tanto defienden según sus intereses. Les recuerdo que España es un estado laico y sus individuos tienen la libertad de pensar y profesar la religión que les venga en gana. Incluso masturbarse cuantas veces quieran al día y hacer el amor por puro placer. Si ustedes son unos reprimidos dejen que los demás no lo sean.

La libertad del individuo, comienza en uno mismo, en su capacidad para decidir libremente. No creo que una mujer decida abortar por gusto o como método anticonceptivo, como muchos manipuladores intentan inculcar, porque cualquiera sabe que no es un tramite muy agradable para ella.

Si una mujer decide abortar, es libre de hacer con su cuerpo lo que le plazca. Entiendo que esto sea una provocación para sus fanáticas mentes pero he tenido que oír cosas atroces en boca de los detractores del aborto. Comentar barbaridades tales como compararlo con el genocidio nazi sin que sus caras se enrojecieran. Esos mismos que hace años no decían nada contra la actual ley que está en vigor o que no salían a la calle a protestar por una guerra injusta en Irak en la que se asesinaron a miles de inocentes. Que hipocresía ¿No se les cae la cara de vergüenza señores? En pleno siglo XXI estos clérigos siguen engañado por medio de la fe. Estos mismos que ya organizan para el 2011 la visita del Papa Benedicto a España con financiación publica. Su yugo inquisidor sigue patente hoy en día, y es muy peligroso para el bien de la humanidad.

No hay comentarios: