sábado, 10 de enero de 2009

PALESTINA: LA SOCIEDAD EL ESPECTÁCULO, EL MURO DE LAS LAMENTACIONES Y LA CAMISETA DE KANOUTÉ


Si hay un filósofo que siempre me ha fascinado ese es Guy Debord. Recuerdo que oí hablar de él por primera vez con apenas 23 años en una de mis clases de libre elección de la facultad. " Historia de los movimientos sociales" . Guy Debord sentó en 1967, las bases de su pensamiento en una complicada pero excelente obra titulada: " La sociedad del espectáculo" de la cual posteriormente realizó una película en 1973.

En su obra, Debord reflexiona sobre la descomposición de la cultura y el debilitamiento de la personalidad bajo el capitalismo industrial y la sociedad de masas. Y busca liberar el comportamiento opresivo del sistema capitalista.
He rescatado algunos de sus fragmentos. Totalmente aplicables al mundo en el que vivimos hoy.
El objetivo principal de la ideología de la clase dominante es, pues, la confusión.


El espectáculo no es una colección de imágenes", "en cambio, es una relación social entre la gente que es mediada por imágenes".


"A los espectadores les une una relación unidireccional con el centro mismo que los mantiene aislados a unos de otros. […] El espectador no se encuentra en casa en ningún sitio, porque el espectáculo se encuentra en todas partes. […] La función del espectáculo en la sociedad consiste en la fabricación concreta de la alienación. […] El espectáculo corresponde al momento histórico en el que el producto completa su colonización de la vida social. […] La mercancía es ahora todo lo que hay que ver; el mundo que observamos es el mundo del producto."







Las imágenes que nos llegan a diario desde Gaza contribuyen al pasotismo de esa sociedad acostumbrada al espectáculo. LA ONU pide el alto el fuego, los países condenan la guerra, pero nadie hace nada. Todos sigue alienados por el poder de las masas. Ni siquiera el muro de las lamentaciones es capaz de acoger las confesiones de los soldados israelíes.¿De qué se lamentarán mientras son cómplices de la matanza de niños y mujeres inocentes, pesará eso sobre sus conciencias?

Pasa lo mismo en el mundo del fútbol. Un hervidero de culturas pero gobernado por hipócritas. El jugador del sevilla celebró un gol de la manera que se ve en la fotografía. Enseñanado una camiseta en apoyo al pueblo palestino. Por esa acción fue sancionado con 3000 euros. La ley dice que ningún jugador podrá exhibir publicidad o mensajes en un encuentro de fútbol, sin embargo , los dirigentes siguen la ley al pie de la letra sólo cuando les interesa ¡Qué triste!




2 comentarios:

alicia alvarez dijo...

Me ha gustado mucho tu visión sobre la penosidad que son las guerras entre hermanos, y lo nada que aportan a la sociedad futura. Saludos.

Anónimo dijo...

Parece que se han vuelto locos pero pienso que más que locos es los israelitas son unos fanaticos, fundamentalistas y extremistas.
Ahora bien no tenemos que olvidar de los paises que rodean a Israel, Siria, Egipto e Irán, que no quieren a los judios y harian todo cuanto estuviese en sus manos para echarlos de alli (tampoco es eso).
Pero estas guerras entre hermanos no se van acabar hasta que se termine con la ignominia, la pobreza y con el bloqueo constante es muy dificil que se acabe con la violencia. Muy buen articulo Ivan, lo cuentas todo muy claro. Un abrazo. Matilde